Homenaje de la AECC Melilla en la cena benéfica anual:
Excelentísimas e Ilustrísimas autoridades, Querida Presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer de Melilla. Queridos voluntarios y colaboradores miembros que sois la vida de esta dignísima asociación. Señoras y Señores..
Querida Pilar.. ¡Qué Feliz me siento! Querida amiga, querida poeta compañera de versos y vivencias. Qué honor poder expresarte publicamente lo que siento.
Querida mujer, generosa y solidaria. Queridos familiares, amigos y Melillenses que hoy estáis aquí, acompañando a esta alfarera del tiempo y de la esperanza que se llama Pilar Oliden;
Decía Ernesto Sábato que un gran escritor es aquel que expresa grandes cosas con pequeñas palabras, al contrario del mal escritor que dice cosas insignificantes con palabras grandilocuentes... Con esas palabras, y esos gestos, podría definirse la trayectoría de una mujer que ha entregado su vida a dos grandes pasiones: Las letras, inconformes, rebeldes, bellas, íntimas, de denuncia para crear mundos donde no hubiera diferencias; y su entrega a los demás, como continuidad de su familia biológica, a través de la cual, ha expresado durante décadas su amor por el prójimo, que en su caso, siempre fue amor al próximo.
Sus pequeños gestos fueron abriendo cada día madrugadas, para crear espacios de dignidad, en esta ciudad con vocación de futuro. Trabajó duro en el campo de la indiferencia, rompiendo a diario el vientre de su tierra estéril haciéndola productiva y fecunda.
Pilar Oliden, mi queridísima amiga, eres madre, poeta y solidaria, porque has sido capaz de inventar nuevos mundos tan solo con la palabra y, has impregnado a la mujer de una más justa y proverbial importancia. Eres madre, mujer comprometida y vital que has sabido sufrir y enjugar lágrimas, siendo capaz de dejarlo todo y caminar siempre esparciendo la semilla de una nueva mujer, con la frente más alta.
Sería muy extenso exponer, en este breve espacio de tiempo, la calidad y grandeza de su obra, pero las pinceladas anteriores son más que suficientes para que se encuentre en la vida de esta prolífica mujer un ejemplo a seguir, especialmente en una sociedad como la actual, en la que el hedonismo, la falta de creencias y convicciones férreas, suponen un triste contraste con vidas como la de Pilar, repletas de todo lo que carecen muchas personas de nuestro tiempo.
Permíteme, Pilar, unir mi felicitación a la de todos, bajo este cielo azul, ahora cuajado de estrellas, sobre esta tierra hermosa y acorralada contra un mar que nunca quiso ser frontera sino brazo que une la España continental y europea con la Melilla africana y española. Permítenos felicitarte por haber nacido, porque rompes y elegancias el aire a tu paso, por los silencios, las penas, los llantos y las revoluciones que has emprendido.
Quiero que sepas, que te necesitamos, como a todas las mujeres que habéis sido vanguardia de una era que os pertenece y ha sabido comprender la importancia de vuestra vida, de la nuestra, de la de todos...
Queremos felicitarte también por ser partícipe de la unión de tus manos con nuestras manos, vitalmente unidas, de tu canto, unido a nuestro canto, por un mundo que ya empieza a aceptar vuestra envidiable misión de creadoras de tiempo y esperanza.
Déjame también unir a esta felicitación, a todos los hombres que están aquí y a los que sin estarlo y sin abandonar sus pensamientos más profundos y sus sentimientos más nobles, apoyan sin reservas la igualdad, que nos hará mejores hom bres, mejores mujeres y mejores ciudadanos de un mundo que ya, os considera imprescindibles.
Felicidades Pilar, ¡Guapa! porque las personas como tú, nos demuestran que las semillas de la lucha solidaria... siempre dan hermosas flores de esperanza, y porque en este día de reconocimiento, ganada a pulso a tu constancia, esa parte de mujer que me forma y que me honra... Se ha llenado de un orgullo indescriptible.
¡Muchas gracias!